Acá las letras de una que le gusta el viaje, los libros, las historias, Galeano y los cuentos (súper Rulfo); el mate, los malabares y la ropa....un viaje de una viajera incansable. No soy tan egocéntrica, pero no sé cómo hacer para que la foto salga más chica.

HOLA

Y es que dicen por ahí que las brujas son malas nomás por ser brujas y conocer los poderes escondidos de la naturaleza....Yo no sé si soy bruja pero me gusta la palabra, y como de palabras uno se hace la armonía de la vida, en la vida las palabras que uno se asigna le van sonando al universo como reales....Así que de mala tengo mucho, de bruja sólo sueños y de palabras todavía busco a aleph y el contenido màgico y secreto de cada una....

Datos personales

DF, Mexico
Solamente me gusta entenderme escribiendo, no sè si lo hago bien o mal, solamente soy yo.

ÉRICA, MIRANDA, Y YO

ÉRICA, MIRANDA, Y YO
En el sillón, haciendo pociones y risas, recuerdos de hermanas que se tejen una a la otra la sapiencia de la lejanía: pociones de amor.

martes, 24 de julio de 2007

De que el tiempo y el espacio nomás no me terminan de cuadrar.

Hoy, un hoy que tenía que ser hoy y así. A veces como que me acostumbro a que las emociones tienen que quedarse porque uno apenas las asimila y luego resulta que en proceso de procesar emociones, y entenderlas si es que se puede, y tratar de usarlas para la vida, de repente en el presente ya te vienen otras más de regalo y luego en el presente no se saben las emociones porque no existe un proceso de proceso.

Hoy un día de, OTRA VEZ, quedarme a mitad de la calle y no saber para dónde ir, para dónde dar el paso para que me lleve a mi donde, porque parece que mis dedos todavía no terminan de acomodar su donde. ODIO, quedarme en medio de una calle sin saber hacia dónde porque aquí no es mi aquí. ¿Cómo explico, que no es por pose, que no es por nada, pero que aunque aquí me gusta yo quiero que mi aquí sea otro y crearme de una vez por todas mi donde hacia dónde ir cuando me quede parada en medio de una calle...y saberme una dirección.

A veces, a veces cuesta ver que la vida dio otra vez una vuelta más y que nada, que después del Parque España, de la azotea de la Ale, de la cena en Sanborn`s y del pastel de limón, le regalo unas letras a Samadhi, que se vuelve más amiga de la Ale, que cada vez ella y yo parece que nos rumbeamos en un destino distinto, pero que antes de que el destino nos sople destinos distintos, qué bueno que Samadhi y la Ale tan hermana se queden juntas.

Va Samadhi, hoy para ti:

"... Inventa mundos nuevos y cuida tu palabra...."

AMO, poder estar, y decirme que todavía, después de todo, me queda la posibilidad de algua posibilidad. Ojalá mi donde me espere.

de Vicente Huidobro.

De que el tiempo y el espacio nomás no me terminan de cuadrar.

jueves, 19 de julio de 2007

cuentitos

Y luego ya no le encotnró fin a la palabra. Y se dijo por más que se dijo y el dijera tuviese dices, que una palabra no se acaba nunca, y que luego cuando se transmite se transmite con el signficado que uno le dio para que el otro acepte o no ese significado y la devuelva al espacio de las significaciones que todavía no son palabras, para que cuando se la transmitan él pueda arrancarla de ese espacio y hacerla así parte de su espacio.
Y entonces le dijeron que no dijera al futuro, y él creyó lo que decían, que eso de jurar al futuro es jurar a la incertidumbre, como si el futuro de tan esencia que es se pudiera saber antes de saberle la esencia, porque tan limpio de tiempos está, cómo lo van a existir con la palabra si él todavía no existe: -seguro por eso se va cuando lo decimos, porque no le gusta que le carguen tiempo antes de tiempo- pensó él, que le habían dicho que no dijera que iba a volar alto porque luego no se hacía. Mientras, mientras éste él pensaba esto (me encanta jugar con las palabras), el otro él pensaba que mejor así, que él quería enseñarle así la palabra, y a no jurar destinos porque ya sabía que uno amarra al futuro con la palabra (pensada o hablada, soñada o escrita, el tiempo sabe leera) y que mejor que él pensara por ahora que no se podía decir al futuro para que ese futuro no le viniera, por lo menos pronto.
Y no le vino pronto ese futuro, más bien ahora parecía que no le iba a venir nunca. Y aunque él había dejado de decirlo pero no lo había dejado de pensar, ese pensamiento que primero se quedó callado luego de tanto callado casi se queda bien mudo. Y luego decirse que siguiera, que iba a volar alto un día, que a lo mejor por este camino sí que era el "sí por fin es éste". Pero por más que intentaba caminos ese camino parecía no ser el camino. Y se iba poniendo otro, ya no era él: por no decirse ese futuro soñado, se le fue la palabra moldeando a otro ser encima de él para que poco a poco se conviertiera en otro que fuera él.
Y el otro él lo notaba que se iba haciendo otro, y se fue sintiendo culpable de haberle enseñado así a su hijo el futuro, y luego la conciencia le pesaba cada vez más pero ya no sabía cómo hacerle para que su hijo creyera de nuevo en que el futuro también puede pronunciarse.
Pero luego vino un giro, y después, mucho después de que el después existe, mucho de esos que se cuentan en cantidad, mucho después, el padre vio volar alto a su hijo, y acariciar el cielo y soplarle a las nubes para que se fueran cuando ya eran muchos días de mucho nublado. Y lo vio alto subirse a lo alto, y vio como él, con las alas de su hijo, también, esta vez, podía volar con los ojos empapados de vuelo.
....El secreto, pensé yo (y eso que un yo todavía no había salido en esta historia, por cierto, me encanta esta perífrasis, como que contrata al pasado en una espera absoluta de un complemento para que pueda, precisamente, pasar en el tiempo) es que el primer yo, a pesar de todo, de lo que nació como mal para uno, al final le hizo bien al otro, que ya sé que fin no es una palabra que ponga fin a nada, pero de este cuento, que de transmisiones se trató, vaya a descansar en el ojo del padre que vuela con ver el vuelo de su hijo, y saber, saber que la palabra que le dijo fue la correcta.

martes, 17 de julio de 2007

Un día me dijo : -voy a volar alto-
Y yo le ví la cara tan cierta, que me inventé un cuento para que no volara y a mí no me dejara triste con mis soledades: -¿Y por qué no vuelas ahora- le dije yo, como queriendo detenerle el deseo. - Es que todavía no sé cómo, pero un día voy a volar alto alto- me dijo con cara de risa.
Y yo me contraté, la palabra, y se la enseñé mal pero de todos modos se la enseñé como cierta, total de ese modo le iba a poner una vuelta más al laberinto y así me lo podría tener más junto.
Le dije que el futuro, cuando se dice, no se hace, que es como la promesa que se exige al universo y que las promesas son mejor callarlas porque luego no se cumplen. Que mejor no dijera nada porque luego el futuro ése que se nombró no viene deveras nunca.
Y él me acuerdo que se quedó pensando, y que no me contestó nada y que se quedó bien calladito toda la noche.

....Se acordó de cuando ellos se prometieron amor y ahora cada uno andaba por su lado y ya la palabra se había disuelto y les había arrebatado el futuro que se habían prometido. Y dejó de decir que iba a volar alto, dejó de decirlo y se quedó mudo. Y yo me quedé mucho más tranquilo, pensé que por no escucharlo no iba a pasar y no se me iba a poner tan evidente en mi narizota. Y como uno está acostumbrado a lo evidente rogando porque de ese modo sea más fácil, pues yo pensé que había logrado callarle la palabra en todos sus sonidos.

Pero pasó, que pasó que esa palabra se hizo muda pero por ser muda siguió sonando, que mañana viene la otra parte del cuento y que buenas noches mañana será un nuevo continuando al empiezo.

lunes, 16 de julio de 2007

Un hombre alado, prefiere la noche.

Ya sé si es que algo sé que lo común existe, que el dolor es otro paso y que las huellas que deja uno detrás le siguen a uno la huella de ahora. Ya sé que la luna está tan lejos que por eso la vemos tan chiquita, que a veces el cielo se abre y podemos verla más grande, que las estrellas a veces mueren y nosotros todavía podemos verlas en el cielo.
Sé que la gente es gente y que yo soy gente igual, que a veces la espalda me duele y que hay días que nomás no deja de llover y a nosotros nos toca estar debajo de toda esa lágrima de arriba. Sé, si es que sé algo, que hay días que por más que pasen no se sienten y que otros se sienten tanto que se agradecen con todo con todo.

Si es que hay un todo, estos días siento que exploto porque no me termino de imaginar lo de adelante, que sí que lo acepto que estoy un poco en espera porque necesito recolectar los pasos que me preceden y que me gusten pa mañana.

De nuevo me perdí en la palabra, hoy va para Evelyn, mi hermana que le dejo palabras para curar el alma. Hoy también va pá mí, que estoy toda llena de llanto y duelo, de imágen y cobijas, pero estoy. A veces pasa.

domingo, 15 de julio de 2007

De las palabras que no me dije.

Había una vez (me encanta comenzar veces así), unas palabras que no existían, y buscando la forma de ser trataban de encontrarse en un espacio, pero cada vez que iban a ser pensadas o usadas, se escondían en otro canal o de plano huían. Y es que nadie, ni siquiera ellas mismas, habían tratado de pensarse un lugar para existir. Porque de que existían existían. En el tiempo nada más pero exitían. Que nomás tenían una sola dimensión pero era el carril en el que hasta ahorita nomás les gusta (¿o gustaba?) estar.

..Quién sabe, igual y mañana lo que hicieron hoy les abra la puerta del aquí, del allá y del más acá y de cualquier locativo.

Y a veces esas palabras nomás no se pronuncian porque no se puede, porque uno quiere y ellas quieren pero resulta que las palabras que nomás son tiempo todavía no se me quieren convertir en espacio, y luego en sonido para que pueda seguir viajando y creando caminos: un pasito para el paso de atrás.
Y luego se piensa en lo que no se pudo decir, y se me viene a la mente el significado ahora que ya no es ese tiempo. Quién sabe si será tarde o no, por lo menos me parece que entendí que a veces no decir no significa que el tiempo cuadre con el espacio. Me parece a mí que voy a ir girando soledades y a levantar las antenitas de nuevo, y apuntarle a los hoyos del cielo, puro amor para el té de limón con mielecita, en el no vaidá o como se escriba.

Besotes a mis verdades, que no tienen cuerpo pero existen peléandole la luz a todo lo que me compone, que no lo que se puede llamar yo no entiendo, y ahora ya no entiendo lo que escribo porque tengo más significaciones que palabras, y mi tiempo de la cabeza no me cuadra del todo en la esquina correcta del espacio de mi cuerpo.

Y a proposito, una letrita, que me acaba de significar unas palabras que no había podido decir.

Estoy cansado de buscar
agún lugar encontraré.
Estoy malherid, estuve sin saber qué hacer.
En algún lugar te espero.
Estoy cansado de esperar
pero igual no tengo adonde ir.
Ayer la tormenta casi me rompe el corazón, pero igual te quiero.
En algún lugar...
El tiempo y la distancia ya no existen para mi,
lo dejé todo aunque todo, lo recuerdo muy bien,
y a fuerza de partir voy a saber lo que es volver, y volver.
Volver.
Un ángel me vino a buscar, pero igual no lo quiero seguir.
Me dice la gente eue deje de pensar así,
pero igual te espero, en algún lugar te espero.
No sé ni donde tengo la nariz!!!

Será que las cosas no vuelven al mismo lugar, (esto es lo mejor!)
pero igual, yo te espero.

En algún lugar te espero (de veras) (Ya por lo menos me lo estoy creando.)

martes, 10 de julio de 2007

hola, BUENAS NOCHES DE pura madrugadita.

Ya no sé qué pensar si pienso mucho o mejor nada o mejor todo ¿Dónde queda el límite entre una y otra palabra si las dos abarcan cada todo contenido en cada una?
Me vuelvo amante de la noche de madrugada, como que cada día me trae de regreso algo del anterior y regala cosas nuevas que no sé si corresponden a recuerdos o nomás pasan y ya.

¿Qué tal que cuando escribo no me parezco a mí misma pero sí a la que trato de ser? ¿Y si la que trato de ser es la que soy pero solamente en distinto tiempo? Son demasiadas preguntas para encontrar una respuesta nada más, qué tal que una enganche a la otra y la posibilidad de veras quiera decir que todo lo posible sea posible en cualquier posibilidad disponible. Y es que se me ocurre, que las posibilidades están disponibles porque qué tal que alguna vez sea incapaz de verle la salida de escape a algún suceso o representación de mi vida que no es mía nomás sino de la que fui en el pasado y de la que seré en el futuro.

Con cada día, pienso de qué se tratará cada día y si de veras existo, qué tal que como diría Borges, nomás soy el sueño de otro y qué tal que ese otro que creó a mi soñador sea el sueño de otro que ya ni alcanzo a imaginar.

Hoy de madrugada estoy pidiendo un milagrito, ése que mi pensamiento proyectó. Hoy me gusta la noche de madrugada mucho muchísimo; hoy fantaseo con el sur y con un té de limón con miel. Hoy me gusta más que mucho Luvina y caminar hacia lo que sea. Hoy, hoy nomás no sé qué escribí pero escribí y ya. Amo la palabra.

jueves, 5 de julio de 2007

RESUCITÉ!!!!

Hoy no: no tengo muchas ganas de escribir pero sí de dormir. Hoy tampoco me alcanza la noche para el día que le sigue a este día que ya se está consumiendo en cero: el hoyo o agujero que une el tiempo con el espacio en un punto que no encontramos.

MÁS LUZ
MÁS LUZ

Ésta va para mis alumnos, que mañana se van a la prepa, que dejan su escuelita y su saloncito y se van a conocer mundos más amplios. Va para ellos, que me hicieron la vida plena, para mis alumnos, que me los reencontré el viernes y esa vez casi sí lloré.

a

Etiquetas

RAQUEL Y YO en el MAR....bailándole

RAQUEL Y YO en el MAR....bailándole

VAMOS QUE DE ESO ESTAMOS HECHOS!!!!!!!

VAMOS QUE DE ESO ESTAMOS HECHOS!!!!!!!

ultima scarica

ultima scarica
jugando a ser reggaetoneras. Antes de ir toda la noche a bailar

EL MATE:UNA POCIÓN MÁGICA.

EL MATE:UNA POCIÓN MÁGICA.
El cebador una bruja, que comparte su alma en la preparación.

Ni nunca más alguien que muera por decir "lo que millones no se animan a decir"

Ni nunca más alguien que muera por decir "lo que millones no se animan a decir"

FAN DE MAFALDA FORVER: PARA LAS ANORÉXICAS SOBRE TODO.

Y es que a mí, fiel anoréxica cuando adolescente, se me vino un día a la mente que si tan en pro de los derechos humanos, ¿qué diablos era lo que hacía tirando, escondiendo, y negándome la comida por la que otros trabajaban? Y luego resultó que, a mis mozos 18, y ya con 10 años de lectura de esta joya, recordé: MAMÁ DE MAFALDA (Raquel, para aclarar) LLORA A GRITO PELADO MIENTRAS SE PRUEBA UN BIKINI Y EL ESPEJO LE DEVUELVE LA FEA IMAGEN DE..... Al gritazo Mafalda llega y pregunta, con cara de verdadero susto, con ese rictus que solamente Quino sabía dibujar: -¿Qué pasa mamá? ¿Por qué llorás? -Porque del verano pasado a éste engordé y la bikini me queda horrenda... Y MAFALDITA, SIEMPRE LA SABIA MAFALDA: -Yo te diría que más de media humanidad no pudo engordar ni un gramo porque NO tuvo QUÉ comer...Pero vos necesitás consuelo, no quedar como una estúpida ¿verdad? NO MÁS PALABRAS....BRAVO MAFALDA!!!!!!!!!!!!!! Quino.- Mafalda 9
Powered By Blogger